El sector del fitness está en jaque debido a la situación financiera en la que se encuentra el mundo. La inflación está provocando un incremento de costes, que muchos ciudadanos no pueden hacer frente, por lo que se ven obligado a renunciar a ciertas actividades para disminuir el gasto. 

Una encuesta llevado a cabo por Morgan Stanley, ha concluido que durante los meses de verano uno de cada cinco europeos ha dejado de ir al gimnasio debido a los motivos anteriormente expuestos. En concreto el 19% de los abonados a gimnasios en Alemania, España, Francia, Reino Unido e Italia ha realizado recortes en membresías de gimnasios. Además, un 25% de los abonados a los centros fitness está dispuesto a renunciar o reducir su gasto en los gimnasios si es necesario. El estudio indica que entre los usuarios que han optado por recortar en este segmento, un 69% lo ha dejado por completo, un 21% ha optado por alternativas más económicas y un 10% ha reducido el número de veces que asisten a los centros fitness.

Asimismo, los eventos deportivos también se verían damnificados, y un 40% de los usuarios advierte que dejarían de asistir a estos eventos si los costes se incrementaran en demasía. No obstante, el sector del fitness no es el que más sufriría, ya que hay otros sectores de ocio como la restauración, los cruceros, los tour operadores y los hoteles, que tienen mayor riesgo de sufrir esta crisis. 

Fuente: Palco23